La publicación de Grupo PUNTO MICE para el sector asociativo

EXPERIENCIAS EN EL METAVERSO ¿UN FUTURO INELUDIBLE?

El metaverso se refiere a una realidad no tan lejana en la que el mundo presencial tendrá una réplica en el entorno virtual. El sector de los congresos se enfrenta a limitaciones que obligan a muchos asistentes a ser más selectivos a la hora de elegir a qué convocatorias asisten: ¿estamos ante la posibilidad de multiplicar acciones sin que la asistencia a los congresos presenciales se resienta?.

Un metaverso es un espacio virtual creado para que los usuarios puedan interactuar a través de un dispositivo mediante avatares. Es importan te aclarar que no existe sólo un metaverso, sino que es posible crear tantos como se desee. Los amantes de los mundos alternativos y virtuales lo describen como un lugar inclusivo que ofrece mucha versatilidad en cuanto a usos y propósitos.

Cuando se habla de espacios virtuales, podemos hablar de creatividad y, sobre todo, de libertad. Es cierto que en el caso de los congresos científicos, el presupuesto es el que define en gran medida las acciones. En el universo médico, se suele sumar el grado de conservadurismo de la presidencia. Pero, más allá de los límites financieros e incertidumbres que puedan condicionar la utilización de la tecnología, una gran inversión inicial se puede amortizar con relativa rapidez.

Algo importante a tener en cuenta es que, si se quiere disfrutar de una experiencia totalmente inmersiva, es necesario contar con unas gafas de realidad virtual. Este dispositivo hace que ordenador y/o teléfono móvil sean prescindibles. No obstante, hay recomendaciones de uso. Así como en las sesiones virtuales la concentración real de los usuarios se estima en 30 minutos como máximo, el tiempo de uso recomendado para las gafas de realidad virtual es de entre 15 y 20 minutos por sesión. Por eso es recomendable adaptar el programa de cualquier sesión que se vaya a proponer en un entorno virtual.

Oportunidades en el metaverso

El metaverso es versátil y se pueden crear tantos metaversos como sea necesario. En un sector en el que el objetivo es compartir y poner en común conocimiento entre personas que buscan ampliar sus investigaciones y desarrollar nuevos proyectos, ¿tiene sentido crear un metaverso para cada ocasión?

Si de lo que se trata es de poner en contacto a profesionales y crear entre ellos relaciones que perduren en el tiempo, existen varias realidades posibles:

  1. Un entorno en el que las OPCs creen sus propios metaversos y ofrezcan sus servicios desde esta nueva realidad, siendo posible alojar en su metaverso cualquiera de los congresos que ofrecen organizar.
  2. Sociedades nacionales e internacionales, agrupadas por especialidades, generadoras de nuevos metaversos que permiten unir en ellos a las diferentes comunidades y en cualquier momento.
  3. Destinos, incluyendo dentro de éstos a diferentes espacios como pueden ser los palacios de congresos, que se presenten en una nueva dimensión virtual, real y paralela a la presencial.

Una opción para poder asistir

Una de las dificultades con la que se encuentran muchos profesionales hoy en día es elegir a qué congreso asistir. Cada vez hay más sociedades especializadas, así como micro secciones dentro de las sociedades, que organizan eventos y congresos. A esto se añade que la industria está cada vez más regulada y limitada a la hora de cubrir gastos de inscripción, alojamiento y viaje de los delegados. En muchas ocasiones, responder a la convocatoria corre a cargo del propio profesional y esto lo hace más selectivo a la hora de elegir.

Crear metaversos que giren en torno a cuidados paliativos, cardiología, ingenierías, motor… y dentro de ellos break rooms grupales para especialidades, facilitaría la formación y comunicación continua entre los grupos de trabajo y profesionales a nivel global. El congreso anual o bianual se convertiría en la convocatoria más importante del colectivo, sin tener que resentirse en la asistencia.

Otra alternativa que va más allá, pero necesita de muchos agentes implicados ya que involucra a ayuntamientos, sedes y otros actores interesados, consiste en replicar un destino en el metaverso, de tal modo que los congresos puedan tener lugar tanto en el espacio físico como en el virtual. Para la convocatoria digital podría proponer una inmersión total en una ciudad sede en la que alquilar una amplia diversidad de espacios, organizar tours por el destino… una nueva manera de ver el mundo ante la que todo está por explorar.

Con estos planteamientos, se debe valorar el coste de mantenimiento de un metaverso permanente y la rentabilidad que sociedades, asociaciones y agencias pueden obtener de ello. Una suscripción independiente, o como un valor añadido a la cuota de socios o los servicios ofrecidos por la agencia, podría ser una posibilidad. Para los patrocinadores se presentaría como una ocasión para mostrarse en nuevos escenarios. La duda se impone sobre si se aplicarían las mismas regulaciones que en los entornos presenciales.

Fuentes de ingresos

Uno de los mayores miedos entre quienes se plantean la organización de un congreso en el metaverso es la falta de interés de la industria por invertir en él. Teniendo en cuenta las opiniones de sociedades, comités y OPCs, los patrocinadores se muestran aún reticentes a este formato ya que la relación con las personas asistentes no termina de convencer.

Atendiendo a las tendencias de la industria farmacéutica en cuanto a los patrocinios, tanto en los entornos presenciales como en el mundo online, puede ser el momento de ampliar horizontes:

  • Diversificar las propuestas de patrocinio: las oportunidades en un entorno presencial son diferentes a las que se generan en un mundo virtual, por lo que la conveniencia de adaptar las ofertas de esponsorización al espacio donde tenga lugar el congreso se revela ineludible y da lugar además a un nuevo abanico de opciones. Las tarifas también deben ser adaptadas.
  • Adaptación a los diferentes públicos: si en el metaverso hay un tipo de público diferente al que asiste al congreso presencial, es necesario adaptarse a él. Si se trata del mismo público que asistiría en presencial, los formatos del contenido estarán adaptados al entorno digital.

Para poder en todos los casos ofrecerles a los patrocinadores las opciones más adecuadas a sus intereses, la inteligencia artificial puede ser una gran aliada a la hora de crear listas de posibles clientes y argumentos de venta. Independientemente del medio utilizado para llegar al cliente, es imperativo utilizar la información disponible de ediciones anteriores, de la propia sociedad, o haciendo preguntas clave a través de las diferentes vías de comunicación que se establezcan con los asistentes.

  • Incluir a patrocinadores externos a la temática del congreso en el área comercial. En el mercado español es más difícil contemplarlo, pero en Latinoamérica es frecuente que marcas de productos de gran consumo estén presentes en las áreas de exposición comercial de los congresos médicos.
  • Extender la oferta comercial a otros proveedores: por ejemplo, cadenas hoteleras interesadas en mostrar su oferta a los asistentes virtuales, cadenas de restauración que quieran atraer a los asistentes a sus entornos presenciales, espacios patrocinados para la celebración de actos sociales, opciones de entretenimiento… el abanico de posibilidades es amplísimo.
  • Todo contenido disponible previo pago una vez finalizado el congreso también puede ser patrocinado.

Entrevistamos a:

Linkedin RAFAEL VIDAL, cardiólogo en el Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña:
Cuando deje de financiarse la asistencia a un congreso, quizá haya que plantearse opciones más asequibles, como asistir a congresos online, porque no habrá otra manera de actualizarse

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Análisis | Edición 1

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