A LOS PIES DE LOS ANDES
Muchos afirman que Santiago de Chile, incluso contando con más de cinco millones de habitantes, sigue manteniendo esa atmósfera de ciudad de tamaño humano que no tienen otras capitales latinoamericanas.
El destino presume de ofrecer más de 350 kilómetros de pistas para bicicleta. El carácter de los chilenos y chilenas, famoso por su dulzura y discreción en comparación con otros vecinos mucho más expresivos, contribuye a ello.
Los años muy convulsos en los que la capital chilena perdió posicionamiento como destino de congresos parecen formar parte del pasado y las perspectivas son halagüeñas. Prueba de ello son los proyectos en
marcha de rehabilitación, cambio de marca y nuevas aperturas hoteleras. El Aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez (Nuevo Pudahuel) ha sido dotado de una nueva terminal para vuelos internacionales.
Hoteles renovados
La hotelería de calidad forma parte de los atractivos de un destino por el que están apostando las cadenas internacionales. En 2017, el emblemático Grand Hyatt Santiago del barrio de Las Condes se convirtió en el primer Mandarin Oriental de Sudamérica, con 310 habitaciones, incluyendo 23 suites. Completamente remodelado, se caracterizan por su amplitud. Todas cuentan con un espacio de descanso.
El antiguo Crowne Plaza Santiago es ahora Le Méridien Santiago y está siendo completamente renovado. Se espera que a finales de 2025 la transformación sea completa, incluyendo las 291 habitaciones.
La próxima referencia de lujo que abrirá sus puertas en el casco histórico es Debaines Hotel Santiago, con 50 habitaciones y suites, junto al Teatro Municipal.
Grandes capacidades
Si bien muchos organizadores siguen reclamando un gran recinto en Santiago de Chile, Espacio Riesco ofrece por el momento las mayores capacidades. El corazón del complejo es el centro de convenciones, con 10.000 m² de espacio dividido en tres niveles en los que crear hasta once salones. Los dos más grandes cuentan con 1.620 m² cada uno. Las mayores operaciones se reciben en Expocenter, un espacio diáfano de 5.000 m² y trece metros de altura. El pabellón ferial tiene una superficie de 13.000 m².
CasaPiedra llevaba muchos años siendo otro de los emblemas en cuanto a congresos en la ciudad. En 2022 su gestión pasó a manos de GL Events, que lo rebautizó como Metropolitan Santiago Convention & Event Center (o Metropolitan Santiago).
Recibe congresos de hasta 1.800 asistentes, cuenta con doce salas modulares y una superficie de exposición de 4.700 m² .
La anterior dirección ofrece ahora el nuevo Centro de Eventos San Carlos de Apoquindo, a 20 kilómetros del casco histórico. El mayor espacio, con columnas, alberga sesiones de hasta 1.200 asistentes.
La Pontificia Universidad Católica de Chile alquila varios de sus espacios más icónicos para la realización de congresos. Los llamados Centros de Extensión Universidad Católica cuentan entre sus espacios con capacidades que alcanzan los 2.950 delegados.
El Centro Alameda es un imponente recinto de estilo neoclásico donde organizar sesiones de hasta 1.000 participantes.
El Club Hípico Santiago es uno de esos espacios de gran abolengo con más de 150 años de historia y 80 hectáreas de jardines. El muy popular “quinto central” es el salón con vistas a las pistas que más cenas de gala recibe, con capacidad para 250 invitados. El más exclusivo Salón VIP alberga comidas con 120 personas. La mayor capacidad entre las diferentes salas se encuentra en el Salón Mármol, con columnas y un aforo de 600 comensales.
El Sector 2.200 es un añadido en los jardines que alberga cócteles de hasta 1.800 asistentes.
Con menos capacidad, pero muy demandado para sesiones con vistas, el Skycenter Costanera recibe congresos de hasta 200 participantes. El mirador situado en el mayor rascacielos de Sudamérica cuenta con dos pisos para eventos –solo uno se puede reservar para no interferir con las visitas–: el 61 es cerrado y climatizado, mientras que el 62 es el último de la torre y a cielo descubierto. Solo el piso superior se ofrece completo para cócteles de hasta 450 invitados. Las privatizaciones clásicas se realizan por partes (caras norte, sur, este y oeste) dependiendo del tipo de actividad y cantidad de asistentes.
Dinamismo cultural
No es casualidad que los centros culturales de Santiago formen parte del abanico de venues para congresos. El calendario es el único obstáculo para la celebración de sesiones profesionales en entornos que demuestran el vibrante ambiente de la capital chilena.
El Centro Cultural Estación Mapocho (CCEM) se presenta como el espacio más grande dentro del casco histórico, con 33 áreas que se ofrecen para sesiones profesionales.
En la Plaza Baja entran 5.000 delegados sentados. En realidad se trata de la antigua estación de tren del centro de la ciudad que en 1994 fue reconvertida en espacio de exposiciones, congresos y eventos.
El Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) goza de una de las mejores ubicaciones, entre la principal avenida de Santiago –La Alameda– y el bohemio barrio de Lastarria.
Una sala de proyecciones cuenta con 256 butacas y a ella se añaden dos salas de conferencias con capacidades para 100 y 70 personas, respectivamente. La Plaza Central, con las características vidrieras que decoran parte de su techo, es el mayor de los espacios, de 832 m².
Cercanía de la naturaleza
Uno de los mayores atractivos de Santiago de Chile es la cercanía de una naturaleza privilegiada y protegida. Mientras que las sesiones de un congreso pueden tener lugar en pleno centro, una cena de gala o un cóctel de apertura rodeados de los Andes y el cielo es algo realmente factible.
Botánico Centro de Eventos fue inaugurado en 2015 y es muy solicitado para cenas de gala, en un marco de arquitectura contemporánea dentro del Parque Natural Quebrada de Macul. Situado a 18 kilómetros del centro histórico, cuenta con un salón principal con capacidad para 600 comensales. 600 hectáreas de naturaleza rodean este recinto en una estratégica ubicación con la ciudad a los pies.
Numerosas bodegas ofrecen sus instalaciones para catas de vino, pero también para banquetes rodeados de viñedos. Es el caso de Concha y Toro, al sur de la ciudad. El patio de entrada de una casona declarada Monumento Histórico Nacional, o los propios viñedos, pueden ser el marco de momentos de networking bajo las estrellas, a 30 kilómetros del Palacio de la Moneda.
No es, ni mucho menos, la única propuesta que vincula enoturismo y congresos.
La excursión a la cordillera es otro de los clásicos para el poscongreso. Normalmente ocupan una jornada completa y no dejan indiferente a nadie: pasar del bullicio de la capital a las nieves de los Andes en la misma mañana, pudiendo dedicar varias horas a practicar esquí en la temporada de nieve, es algo que pocos destinos pueden ofrecer. Sobre todo cuando otra de las opciones cercanas a Santiago consiste en el disfrute del mar en Viña del Mar, o de la singular arquitectura en las alturas que se asoman al océano en Valparaíso.
Nuevos espacios y hoteles se prevé que refuercen el posicionamiento de Santiago de Chile como destino MICE y congresual. La ampliación del mítico hotel Sheraton Santiago, a los pies del Cerro San Cristóbal y hoy por hoy el mayor hotel del destino, parece solo el primero de importantes pasos en favor de que el destino pueda albergar operaciones más grandes.
SANTIAGO DE DÍA
TESOROS DE LA HISTORIA
El casco histórico de Santiago de Chile está lleno de historia. Una búsqueda del tesoro puede ser la excusa para descubrir la vinculación del país con la religión en la Catedral Metropolitana de Santiago; con la historia política y los acontecimientos que tuvieron lugar en el Palacio de la Moneda, o con el pasado y presente de los pueblos indígenas en la Plaza de Armas y su monumento homenaje a los Mapuches. Durante media jornada se pueden recorrer estos hitos a pie descubriendo en equipos secretos relacionados.
INMERSIÓN EN LA CORDILLERA
Durante una jornada completa, la cordillera de los Andes se ofrece como marco para una salida en grupo, preferentemente hasta diez personas, en la que incluir programas simultáneos de distinta intensidad física. Todo el año es posible hacer trekking o rafting, mientras que la temporada de esquí se extiende de junio a octubre. La infraestructura de restauración más cercana a Santiago también se ofrece para organizar degustaciones de gastronomía local sobre la nieve.
EXPERTOS EN VINO
Los valles de Maipo, y el más lejano de Casablanca, cuentan con amplísimas extensiones de viñedos y numerosos espacios en los que programar catas. Se pueden organizar programas de media jornada durante las que descubrir cavas subterráneas, aprender sobre la elaboración del vino o participar en catas a ciegas acompañadas de maridajes con productos típicos de la gastronomía local, presentados según sus regiones de origen.
PARQUE METROPOLITANO DE SANTIAGO
Es el más grande de Latinoamérica y el cuarto más grande del mundo. Está compuesto por varios cerros, entre ellos el de San Cristóbal, a cuyos pies se encuentra el mayor hotel con centro de convenciones de la ciudad –Sheraton Santiago–. Cuenta con un funicular que asciende sus 880 metros de altura. Un cóctel al atardecer con vistas a la ciudad se puede organizar en Vista Santiago (antes Enoteca), en el mismo cerro.
SANTIAGO DE NOCHE
CIELOS DE CHILE
Aunque desde Santiago no se pueden admirar los cielos de La Serena o el desierto de Atacama, una visita al Observatorio Astronómico Nacional (OAN), ubicado en la cumbre del Cerro Calán (barrio Las Condes), permite hacerse una idea de todo lo que se puede observar en los cielos de Chile. Pertenece al Departamento de Astronomía de la Universidad de Chile y la visita, guiada por los mismos estudiantes, incluye un aprendizaje sobre el uso de los telescopios que después se utilizan para una observación nocturna.
SANTIAGO BOHEMIO
El barrio Bellavista es el sector más bohemio de Santiago y cuenta con un sinfín de pubs, bares y discotecas en los que descubrir durante un congreso la efervescente vida musical y nocturna de la capital chilena. Puede ser la continuación de una tarde recorriendo espacios emblemáticos como La Chascona, una de las casas de Pablo Neruda, el poeta Premio Nobel de Literatura. Los barrios de Lastarria y Bellas Artes, más enfocados en la cultura, cuentan con teatros, centros culturales, galerías de arte y tiendas de diseño y antigüedades que se ofrecen para eventos.
CULTURAS PRECOLOMBINAS
Una visita privada del Museo Chileno de Arte Precolombino permite hacer coincidir un cóctel con un recorrido por un duro episodio de la historia chilena. Los Mapuche son un pueblo originario del centro-sur de Chile, hoy representado por más de 600.000 individuos, que mantienen una delicada relación con el Estado por la gestión de sus tierras ancestrales. La exposición también incluye todo tipo de piezas relacionadas con las diferentes culturas precolombinas en el continente americano.
DANZAS ANCESTRALES
Bali Hai es una sala de fiestas que ofrece de martes a sábado un paseo por la historia y regiones de Chile a través de sus danzas y tradiciones. Grupos de hasta 200 comensales pueden cenar en este lugar que ya se presenta como un venue único, con paredes talladas a mano en las que están presentes corales, maderas nativas y esculturas procedentes de todo el país. Son el marco de un espectáculo en vivo que incluye desde danzas Rapanui a muestras de folclore.